En primeros tres años de AMLO perforaciones alcanzan máximos y superan lo detectado en lapsos similares de EPN, Calderón y Fox
En los tres primeros años del actual gobierno el huachicoleo ha escalado a niveles históricos, con la incidencia de tomas clandestinas muy por encima de lo que ocurría a la mitad de cualquier administración pasada.
Entre 2019 y 2021 el crimen organizado dedicado al robo de combustibles ejecutó 35 mil 196 perforaciones ilegales a lo largo de la red de 17 mil kilómetros de ductos de la petrolera estatal.
Con el expresidente Enrique Peña Nieto se reportaron 11 mil 499 en los primeros tres años de su sexenio, mientras que con Felipe Calderón y Vicente Fox hubo mil 178 y 443, en ese orden.
De acuerdo con información de la Gerencia de Estrategia y Sistemas de Seguridad y Monitoreo de Pemex, entregada vía la Plataforma Nacional de Transparencia, con fecha del 1 de febrero pasado, el crimen organizado le repitió en 2021 la dosis de un año antes, con un total de 11 mil 37 perforaciones ilegales en ductos para extraer todo tipo de hidrocarburos, desde petróleo crudo hasta gasolinas, diesel y turbosina. En 2020 los huachicoleros habían realizado 11 mil 22 tomas clandestinas.
Dicha área de Pemex reconoce que la delincuencia organizada dedicada al robo de combustibles no cesa en su empeño de extraer lo que puede de los ductos de la petrolera estatal.
Es decir, en tres años estos delincuentes han ejecutado en promedio 32 perforaciones ilegales por día. Con Peña Nieto fueron 10.5 por día; con Calderón 1.0, y con Fox, 0.4 cada día.
El abultado número de tomas clandestinas registrado por la empresa en los últimos tres años se presentó a pesar de que el gobierno inició un Plan de Combate al Robo de Combustible basado en cinco acciones.
Entre esas estrategias se incluyó mantener y reforzar la vigilancia en todos los ductos, aumentar el volumen de distribución por mecanismos alternos y adquirir 500 pipas con capacidad de 60 mil litros para transportar combustibles a las estaciones de servicio.
Asimismo, se decidió desmantelar redes de complicidades que fueron detectadas incluso dentro de Pemex.
Hace unos días, en una llamada con inversionistas para dar a conocer los resultados operativos y financieros de Pemex en 2021, el director corporativo de Finanzas, Antonio López Velarde, comentó que en materia de robo de combustibles la empresa ha tenido una disminución de 92.7% en el volumen sustraído en los tres primeros años de la administración de acuerdo con la información publicada por la Comisión Nacional de Seguridad.
Pemex argumentó que la desviación por el mercado ilícito de combustibles en los primeros tres años de este gobierno promedió 5.1 mil barriles diarios, cuando en 2018 llegó a alcanzar un máximo de 56 mil barriles por día.
Pérdidas millonarias
Según información registrada en los Sistemas Jurídicos Institucionales, la petrolera señaló que el quebranto ocasionado por la comisión del delito de robo de hidrocarburos a nivel nacional alcanzó apenas 206.9 millones de pesos en 2020 y 282.9 millones en 2021. Sin embargo, el problema les ha provocado a la empresa y al país un quebranto por 27 mil 839.2 millones de pesos entre 2006 y 2021, es decir, un promedio anual de mil 70 millones de pesos.
Aproximadamente 51% de ese quebranto corresponde al robo de gasolinas; 18% al hurto de diesel; 3.1% de combustóleo y 2.3% de petróleo crudo.
El quebranto se obtiene “una vez que se cuenta con el dictamen de valuación de daños”, aclaró Pemex a través de un oficio de su Dirección Jurídica.