Los refrigeradores necesitan una buena limpieza de vez en cuando, de lo contrario corremos el riesgo de que nuestros alimentos se descompongan más rápido
El refrigerador es uno de los electrodomésticos más importantes que tenemos en nuestro hogar. Cuidarlo y mantenerlo limpio puede ayudar a que nuestros alimentos se conserven en mejores condiciones y que el periodo de vida de nuestro aparato sea de muchos años. Por ello es que debemos darle una limpieza adecuada, que si bien no debe ser diaria, si es importante para eliminar bacterias que pueden causarnos daño.
Considera que la limpieza de nuestro refrigerador es tan importante como el aseo de nuestra casa. Sin embargo, muchas personas no saben cada cuánto tiempo se debe de lavar el refrigerador y cómo hacerlo. Por ello a continuación te vamos a dar algunos consejos.
¿Cómo y cuándo hacer la limpieza de nuestro refrigerador?
Según información de la marca Samsung, cada año debemos darle una lavada profunda a nuestro electrodoméstico, retirando todas las bandejas y usando una solución de jabón con agua tibia. No obstante. existen otras fuentes que revelan que el periodo debe ser más corto.
De acuerdo con una publicación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), mantener en higiénicas condiciones nuestro refrigerador ayuda a que la temperatura de este aparato se mantenga adecuada ayudando a retrasar la reproducción de bacterias y conservando las cualidades de nuestros alimentos. En este caso señala que el periodo adecuado para limpiar nuestro refrigerador es una vez al mes.
Por otra parte, el Centro para el Control y prevención de Enfermedades (CDC), recomienda que, si vas a realizar la limpieza de tu refrigerador, tengas estos artículos a la mano: bolsas que se puedan sellar, agua jabonosa y caliente, toallas o trapos limpios y, opcional, una mezcla de agua y cloro para desinfectar.
8 pasos para una limpieza exitosa del refrigerador
Para la limpieza mensual de nuestro electrodoméstico, la publicación de la UNAM, citando a la CDC nos recomienda seguir estos pasos:
1.- Desconectar el refrigerador
Es importante señalar que para está limpieza hay que ser ágiles pues el tiempo máximo que se debe destinar a esta actividad es de 2 horas a partir de que se desconecta el aparato.
2.- Sacar todos los alimentos
Cómo los alimentos se encuentran en un ambiente frío es importante que al sacarlos del refrigerador los mantengas en un lugar fresco y deseches los que ya no estén en buen estado, presenten un mal olor o tengan hongos. Coloca aquellos que vayas a tirar en una bolsa de plástico sellada. En caso de que estén en un envase reutilizable, como un tupper, lo mejor es lavarlo con agua caliente.
3.- Desmontar estantes, cajones y rejillas
Para este paso debes verificar que las partes son desmontables. De ser así, sácalas y llévalas a tu fregadero o lavabo. Si no se pueden quitar prepara tu solución de limpieza para tallar el refrigerador.
4.- Limpieza interior y profunda del refrigerador
Prepara una mezcla con los siguientes ingredientes: 2 cucharadas de bicarbonato disueltas en una taza de agua, también puedes utilizar 1 taza de vinagre disuelta en 3 tazas de agua. Posteriormente puedes utilizar una esponja o un trapo limpio, humedecerlo en la fórmula que hiciste, exprimir bien y limpiar el interior del refrigerador. Recuerda tener mucha precaución para que el líquido no entre en los conductos internos o en las rejillas de ventilación.
Si hay alguna mancha difícil, lo que puedes hacer es tallarla con un poco de pasta de dientes. Después limpia con agua, de preferencia caliente.
Finalmente, para que quede completamente desinfectado tu refrigerador, puedes agregar una cucharada de cloro en un litro de agua, humedecer un trapo con esa mezcla y pasarlo por el interior.
5.- Limpieza de estantes, rejillas y cajones
Usa una fibra o cepillo para tallar cada una de estas piezas, puedes utilizar agua fría o caliente mezclada con jabón. No olvides enjuagar bien para eliminar cualquier residuo. En caso de que tengas repisas de vidrio, se recomienda lavar con agua fría para que no se maltraten o se rompan.
Después de lavarlas puedes dejar que se sequen solas o utilizar un trapo, asegúrate que cada una de estas piezas queden completamente secas antes de colocarlas nuevamente en el refrigerador.
6.- Elimina Olores
Si después de lavar tu refrigerador percibes un mal olor, lo que debes hacer es colocar en un recipiente de vidrio café recién molido o dos cucharadas de bicarbonato de sodio y ponerlo en la esquina de tu refrigerador, con esto los malos olores se irán. Solo recuerda y avisa a tu familia que no es comestible.
7.- Regresa los alimentos al refrigerador
Puedes usar la fórmula que utilizaste al interior de tu refrigerador para limpiar las botellas, frascos y recipientes. Una vez hecho ese paso acomoda todo en tu electrodoméstico. En la parte de enfrente, coloca los alimentos que se usan con mayor frecuencia. También te recomendamos dejar un espacio entre los alimentos y las paredes para que el frío se distribuya mejor.
8.- Vuelve a conectar tu refrigerador
Antes de realizar este paso limpia las puertas y el exterior de tu aparato, para ello, utiliza un trapo húmedo con un poco de agua y cloro o un limpiador multiusos.
Después de seguir estos pasos te garantizamos que tu refrigerador se habrá desinfectado y tus alimentos se encontrarán en un mejor estado, libres de bacterias y hongos.
¿Cómo aprovechar el espacio de mi refrigerador?
Si bien es cierto que las personas tienen diferentes alimentos y los acomodan en el refrigerador como mejor les parece dependiendo del espacio, vale la pena saber que existen algunas áreas que favorecen la temperatura y te ayudarán a aprovechar más tu electrodoméstico.
En la zona superior, es decir, en el primer piso de arriba, es donde comienza a transitar el frío, por lo que es ideal para guardar alimentos preparados, postres o fruta picada.
En el piso de en medio puedes poner alimentos para recalentar, carnes frías como jamón o salchichas, quesos, yogurt, crema, así como huevo y leche, estos alimentos deberían durar alrededor de dos semanas y este lugar favorece su conservación.
En la zona inferior, o en el último piso, donde transita con mayor intensidad el frío, guarda carnes crudas, como res, pescado o pollo. Para ello colócalos en una bolsa sobre un plato para evitar derrame de líquidos.
En el cajón o zona de vegetales, coloca las frutas con cáscara y verduras sin lavarlas.
Finalmente, en las puertas, lo ideal es colocar condimentos, conservas, mermeladas o bebidas. Si consumes huevo o leche en menos de dos semanas, estos también pueden ir ahí.
Ahora que ya sabes todo sobre cómo y cuándo hacer la limpieza de tu refrigerador para que esté quede desinfectado y los alimentos se conserven por más tiempo estamos seguro que tu electrodoméstico durará más.