El Club Atlas fue fundado el día de la Asunción de la Virgen, el 15 de agosto de 1916. Aunque el nombre corresponde a un personaje de la mitología griega, los fundadores quisieron que los colores distintivos del club fuesen el rojo y el blanco en honor a san Lorenzo mártir.
(ZENIT Noticias / Guadalajara).- El pasado domingo 29 de mayo se jugó la final de la Liga MX de fútbol mexicano entre los equipos Pachuca y Atlas. El equipo originario de Guadalajara, el Club Atlas, venció por 3 a 2 al equipo de la capital del Estado de Hidalgo en el centro de México.
Tras obtener su título, los jugadores, los directivos y el personal técnico del Atlas acudieron a la catedral metropolitana de Guadalajara para tener una misa de acción de gracias. Los jugadores llegaron a la catedral metropolitana hacia las 2:45 de la tarde y unos minutos después los directivos.
Mons. Manuel González Villaseñor, obispo auxiliar de Guadalajara, felicitó al equipo, y comentó: “Así como un día nos trajeron nuestros padres a la iglesia, así nos llevaron por primera vez al Estadio Jalisco donde nos maravillamos de los colores Rojinegros. Por eso hoy hay varias cosas que nos unen es el amor a Dios y a este equipo”.
Tras la misa de acción de gracias el equipo recorrió las calles de la ciudad para celebrar el triunfo.
La historia “católica” del Club Atlas
El Club Atlas fue fundado el día de la Asunción de la Virgen, el 15 de agosto de 1916. Aunque el nombre corresponde a un personaje de la mitología griega, los fundadores quisieron que los colores distintivos del club fuesen el rojo y el blanco en honor a san Lorenzo mártir. San Lorenzo era el santo patrón del colegio donde estudiaron los fundadores: el color negro evocaba a san Lorenzo y el rojo su sangre. La ocasión anterior en que el equipo ganó el campeonato también tuvo una misa de acción de gracias en la catedral de Guadalajara.
