De las Iglesias Catedrales de México
En 1998 la aún joven ciudad de Cancún fue designada como sede obispal de la diócesis de Quintana Roo en virtud de su población de unos 460,000 habitantes, de los cuales 337,000 son católicos y 18,000 activos; con tal nombramiento se hizo necesaria la planificación de la iglesia obispal.
Cancún hasta entonces había sido la segunda sede de la Prelatura Apostólica de Quintana Roo, cuya radicación principal se encuentra en la capital del estado habiendo sido establecida por el Papa Paulo VI en 1970.
El objetivo principal que se busca acometer es el de convertir el proyecto en un símbolo religioso que convoque a la unidad e integración del pueblo católico de Cancún; coadyuvando a construir una identidad y arraigo para una población prioritariamente inmigrada por un lado y por el otro como un elemento de cohesión social, conceptos que encuentran común denominador en la región del pueblo.
La catedral dedicada a la Santísima Trinidad se ubica en el centro geográfico del asentamiento planificado por FONATUR, en el así llamado ombligo verde, reserva de dos hectáreas en donde el diseño respetuoso con la naturaleza dará cabida a un foro de 3,000 feligreses.
El conjunto arquitectónico de 12,000 m2 que a la usanza de las cresterías mayas sobresaldrá de la característica selva baja caducifolia estará compuesto por una nave principal, un edificio anexo de salones y auditorio; un complejo de criptas-capillas, como servicios complementarios contará con un estacionamiento para 180 autos; oficinas para la residencia y los servicios obispales; y un atrio para acoger hasta 3,000 congregados