Nueva York.— Brasil, México y Perú son los países que presentan más casos de viruela del mono en Latinoamérica, con aumentos en los contagios que se deben en parte a las festividades multitudinarias en junio de la comunidad LGBT, dijeron ayer funcionarios de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
La OPS indicó durante una conferencia virtual con periodistas que se han reportado más de mil 300 casos de viruela del mono en las Américas desde el 10 de mayo en 14 países y territorios, sin ninguna muerte registrada. Eso representa 14% del total de casos en el mundo.
A pesar de que la enorme mayoría de los casos en la región están en Estados Unidos y Canadá, Brasil cuenta con 219 casos y le siguen México con 35 y Perú con 29. Hasta la fecha, se han reportado más de 5 mil casos de viruela del mono en 51 países del mundo, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC).
A pesar de que por el momento no ha habido fallecimientos, la situación es “preocupante” debido a la tendencia al alza de los contagios, declaró Carissa Etienne, directora de la OPS.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho que la gran mayoría de los casos reportados han sido en hombres que han tenido relaciones sexuales con otros hombres, pero indicó que existe ahora “un número pequeño” de casos de contactos en el hogar, incluidos en niños.
La mayoría de las personas han manifestado síntomas como sarpullido, fiebre, fatiga, dolor muscular, vómitos y escalofríos.
En Latinoamérica el aumento en las cifras también se explica porque más laboratorios reportan los casos, explicó Sylvain Aldighieri, gerente de incidentes para el Covid-19 de la OPS.
En México hay 35 casos confirmados en seis estados, dijo Aldighieri: 22 están en Ciudad de México; nueve en Jalisco; uno en Veracruz; uno en Colima; uno en Baja California y uno en Nuevo León. El 94% de los pacientes son hombres y 60% de ellos tienen VIH.
Aldighieri también dijo que la proporción de casos en los que no hay antecedentes de que el afectado haya viajado está aumentando, “lo que destaca nuestra preocupación de establecerse una transmisión más sostenida”, indicó.
