Dado que el recurso debe aplicarse en este año fiscal (condición para poder recibirlo), la catedral de Ciudad de México sufrirá alteraciones que afectarán un poco a quienes desean visitarla.
Por: Enrique Villegas
(ZENIT Noticias / Ciudad de México).- Tras cinco años deteniendo los fondos, el gobierno de México finalmente dio luz verde, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, para que los recursos del Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (Fonden), posibiliten obras de reparación en la catedral metropolitana. El fideicomiso había destinado una inversión para la catedral tras el sismo de 2017 que vino a rematar una serie de daños provocados por desastres naturales a lo largo de las últimas décadas.
El rector de la catedral, el P. Ricardo Valenzuela, dice que los especialistas hablan de la catedral como un “mazapán”. Eso debido a que su estructura está debilitada pues hay muchas afectaciones y pocas obras de reparación y mantenimiento.
Sobre la luz verde para la aplicación de los fondos, el rector dice que le parece penoso tener que “corretear a las autoridades para lograr que los recursos se aplicaran. Situaciones como éstas no se pueden dejar pasar”. Y es que el Gobierno Federal actual puso muchas trabas, no obstante que el recurso ya estaba asignado. De ahí que las necesarias mejoras ya vayan con 5 años de retraso, con lo que supone de perjuicio en las partes ya dañadas como las cúpulas y las torres: “Imaginemos cómo se encuentran después de cinco años las zonas afectadas: hubo un temblor que dejó grietas, éstas se fueron haciendo grandes, entró agua, se generaron plantas y afectaciones internas. Esto es un tema de negligencia bastante delicado”.
Además de los daños en las partes mencionadas, los recursos recibidos para uno de los monumentos de interés público más relevantes de la Ciudad de México se invertirán en reparación de filtraciones de agua, restauración de las esculturas del artista Manuel Tolsá (una de ellas se derrumbó a raíz del sismo).
Dado que el recurso debe aplicarse en este año fiscal (condición para poder recibirlo), la catedral de Ciudad de México sufrirá alteraciones que afectarán un poco a quienes desean visitarla. Esto ocurrirá del mes de septiembre al mes de diciembre de 2022: “Iremos haciendo cambios de entradas y salidas, pero en ningún momento se verá afectada la Catedral en cuanto al culto y en cuanto a los servicios. Se habrán de poner, en las mamparas y estructuras de trabajo, las indicaciones e información pertinentes para que la sociedad pueda acudir a la iglesia-catedral, y para que conozcan lo que se está haciendo”, declaró el rector.