Los sismos que han sacudido al país en septiembre ya ha quedado marcado para las y los mexicanos. Existen varios tipos, ya que sus características e impactos son variados.
La memoria de los sismos del 19 de septiembre de 1985, 2017, y ahora el de 2022, han marcado a las y los mexicanos que ya sienten temor por esta época del año. Apenas, en la madrugada de este jueves, un sismo de magnitud 6.9 ‘despertó’ a una parte del país nuevamente. Pero ¿cómo es que se generan estos movimientos, cuántos tipos existen y cuáles son sus características e impactos?
La tarde del lunes 19 de septiembre, un nuevo sismo se registró en México con magnitud de 7.7 grados con epicentro a 63 kilómetros al sur de Coalcomán, en Michoacán. Es el tercero en esta fecha en menos de 40 años. Lamentablemente, los sismos en México con epicentro en las costas del Pacífico son viejos conocidos de los mexicanos.
Y con todo esto, en la memoria de la población ya son palabras comunes sismos, temblores y terremotos, que son términos usuales para referirse a los movimientos de la corteza terrestre. Sin embargo, técnicamente hablando, el nombre de sismo es más utilizado (terremoto se refiere a sismos de grandes dimensiones). Te mencionamos los tipos que existen por sus características e impactos.
¿Cuántos tipos de sismos existen?
Los sismos son de corta duración e intensidad variable y son producidos a consecuencia de la liberación repentina de energía, según el Servicio Geológico Mexicano (SGM).
Es un fenómeno se produce cuando la fuerza sobre un volumen específico de roca es mayor a la resistencia de esta. Esto provoca una ruptura violenta que a su vez libera una cantidad importante de energía que se expande a través de ondas sísmicas.
Por sus causas características e impactos, se dividen en cinco tipos según su orden de importancia, de acuerdo con el SGM.
- Tectónica
Son los sismos que se originan por el desplazamiento de las placas tectónicas que conforman la corteza, afectan grandes extensiones y es la causa que más genera sismos.
- Volcánica
Es poco frecuente; cuando la erupción es violenta genera grandes sacudidas que afectan sobre todo a los lugares cercanos, pero a pesar de ello su campo de acción es reducido en comparación con los de origen tectónico.
- Hundimiento
Cuando al interior de la corteza se ha producido la acción erosiva de las aguas subterráneas, va dejando un vacío, el cual termina por ceder ante el peso de la parte superior. Es esta caída que genera vibraciones conocidas como sismos. Su ocurrencia es poco frecuente y de poca extensión.
- Deslizamientos
El propio peso de las montañas es una fuerza enorme que tiende a aplanarlas y que puede producir sismos al ocasionar deslizamientos a lo largo de fallas, pero generalmente no son de gran magnitud.
- Explosiones atómicas
Realizadas por el ser humano y que al parecer tienen una relación con los movimientos sísmicos.
Aunque la interacción entre placas tectónicas es la principal causa de los sismos no es la única. Cualquier proceso que pueda lograr grandes concentraciones de energía en las rocas puede generar sismos cuyo tamaño dependerá, entre otros factores, de qué tan grande sea la zona de concentración del esfuerzo.
Cabe aclarar que los sismos no se dividen en trepidatorios y oscilatorio, pues estos tienen ambos componentes, de acuerdo con el Cenapred. El terreno, explica, ante el paso de las ondas sísmicas, no se mueve exclusivamente en dirección horizontal (oscilatorio) o vertical (trepidatorio) sino más bien de una manera compleja por lo que dichos términos no son adecuados para caracterizar el movimiento del terreno.