La reina Isabel siempre destacaba en los eventos donde estaba presente con sus looks coloridos. Te decimos por qué siempre vestía así
La noticia de la muerte de lareina Isabel II tiene al mundo en llamas, pues la monarca más longeva de la historia actual británica no era cualquier personaje de la vida pública. Luego de 70 años en el trono inglés, la reina ha dejado un lugar vacante en la monarquía, la cultura popular, la diplomacia mundial y, si nos ponemos más específicos, dejó un lugar en la moda que difícilmente se llenará.
Pensando enIsabel II, todos tenemos una imagen única e irrepetible de lo que vestía la reina. Hasta el día de hoy, mucha gente en la cultura popular piensa que sus elecciones de vestuario eran porque ella era una adicta al color.
Siendo sinceros, el pensamiento que compartía la mayoría sobre que le gustaba “robar miradas cuando llegaba” se encuentra tan lejos de la realidad, que es casi imposible no hablar de un tema que hasta el día de hoy es un hito en la monarquía británica.
Un arcoíris de carne y hueso
No hay color que la reina Isabel no haya usado y, siendo francos, fue de las primeras en arriesgar por una paleta de colores tan viva que hoy en día su armario lleno de trajes sastre se puede convertir en el sello personal de la persona más fotografiada en el mundo.
Hay una razón muy específica por la cual todos los ojos del mundo vimos a Isabel II usar colores bastante vivos y la reveló la nuera de la reina para el documental de 2016 llamado “La Reina a los 90”, donde la condesa Sofía de Wessex dice claramente que la ahora finada Isabel II usaba esos colores para poder ser vista entre las multitudes de personas que acudían a sus eventos de Estado.
Además, si aterrizamos la imagen tan importante que era Isabel II para los ingleses, entendemos la importancia de ser vista por el pueblo que ella dirigía.
Otro punto muy importante es que este tipo de colores ayudaban al cuerpo de seguridad de Isabel II para que pudiera ser localizada de una forma más eficiente entre un tumulto de gente, en el caso de que la reina llegara a sufrir un percance o un atentado.
Aunque algunas fotos de Isabel dentro del palacio de Buckingham muestran que llevó prendas más sencillas y con prints florales, era casi obligatorio que en sus apariciones públicas vistiera de colores totalmente llamativos.
