Este año se fabricarán 142 mil vehículos del segmento en el país, consideran fuentes del sector; precio e infraestructura de carga, entre factores que limitan ventas locales
La tendencia global a la electromovilidad impulsará la producción de autos eléctricos en el país, anticipan fuentes del sector. Al mismo tiempo, la venta local de estos vehículos es marginal.
La Industria Nacional de Autopartes (INA) estima que este año se fabricarán 142 mil vehículos eléctricos, el doble en comparación con 78 mil que se produjeron el año pasado, equivalentes a poco más de 2% de la producción total del país.
Las inversiones de Ford y General Motors aportarán gran parte de ese volumen, y se estima que en los próximos siete años se fabrique un millón de vehículos eléctricos en el país, dijo Alberto Bustamante, director general de INA.
Ford es la armadora con la apuesta más grande en autos eléctricos, pues este año planea elevar su producción de 77 mil a 210 mil vehículos eléctricos Mach-E en su planta de Cuautitlán, Estado de México.
Este incremento en la producción forma parte de una inversión mundial de 50 mil millones de dólares para aumentar la producción de vehículos eléctricos y, en Cuautitlán, le permitirá incorporar nuevos turnos.
Ford fabrica el Mustang Mach-E en el Estado de México y se exporta a Norteamérica, Unión Europea y China.
En su última visita a Estados Unidos, el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a que la mitad de autos que se fabricarán en México en 2030 serán eléctricos o híbridos.
Hace días, BMW anunció que en San Luis Potosí se invertirán 800 millones de euros para fabricar autos eléctricos y baterías para ese tipo de vehículos.
A su vez, GM está completando una inversión por mil millones de dólares en la planta de Ramos Arizpe, Coahuila, para fabricar autos eléctricos este año, baterías y otros componentes.
Además, Volkswagen y Audi no han revelado los detalles de qué vehículos eléctricos fabricarán en Puebla, pero tienen planes al respecto. Stellantis, dueña de Peugeot y Fiat, también proyecta fabricar autos eléctricos en sus plantas entre 2025 y 2027.
Centro Automotive México anunció en enero una inversión de 200 millones de dólares para fabricar baterías de iones de litio en Nuevo León.
El cambio de producción a vehículos eléctricos también impulsará las inversiones de los fabricantes de componentes y autopartes como Foxconn, de origen taiwanés; Nidec, japonesa, y Sodecia, de Alemania.
Además, todavía no es oficial, pero hace unos días López Obrador confirmó el interés de Elon Musk por ubicar una planta automotriz de Tesla en México, ya sea en Nuevo León o Hidalgo.
Consumo lento
Aunque la industria automotriz fabrica cada vez más autos eléctricos en el país, la mayoría se exporta, pues en el mercado mexicano significan apenas 0.5% de las ventas totales, según cifras de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
Brais Álvarez, gerente de cuenta automotriz de la consultora J.D. Power México, consideró que para incrementar la venta local de autos eléctricos se necesitan tres aspectos básicos: una buena infraestructura de recarga, producto a precios adecuados y mayor producción.
“Ya se vislumbra una oferta de autos eléctricos amplia, con marcas incrementando la producción, pero no se ve un avance en la infraestructura de recarga, una de las principales necesidades para que la adopción del eléctrico aumente”, comentó.
Al momento, la red de recarga para eléctricos ha sido por iniciativa de cinco o siete empresas en alianzas con otras que colocan cargadores en centros comerciales o estacionamientos, pero no hay un mercado abierto de electrolineras, como en Estados Unidos, donde el gobierno apoya la compra de estos vehículos.
En cuanto al precio, Álvarez opinó que la inflación ha emparejado el precio de los autos a gasolina con los eléctricos, pero se está empujando al consumidor a que dependa de una estación de carga en su casa, lo cual tiene un costo extra y no es práctico para todo mundo.
La AMIA considera que el gobierno debe ampliar el marco normativo para que se potencie la producción y venta de autos eléctricos en el país, incluyendo establecer estándares mínimos de seguridad para vehículos híbridos, infraestructura de recarga e incentivos fiscales para convertir vehículos de combustión fósil a eléctrica.
