Ocupa primera posición como el país con más eventos en los que ciudadanos fueron objeto de ataques directos, con 5 mil 945 acontecimientos: reporte de ACLED
Bruselas.— El conflicto que libra México no es sólo entre grupos delictivos como algunos suelen comentar, hay una violencia dirigida contra la población civil por parte de agrupaciones criminales.
Ese es el panorama que presenta el Armed Conflict Location & Event Data Project (ACLED), en un informe en el que sitúa a México como la nación con mayor número de actos de agresión deliberada contra civiles.
De acuerdo con el análisis de los datos recopilados durante 2022 por la organización especializada en el mapeo de patrones de inestabilidad social en el mundo, los países con mayores niveles de violencia política registraron también los indicadores más altos de ataques contra la población.
Las naciones que enfrentan los mayores índices de violencia asociada a la criminalidad organizada superaron el año pasado a los Estados catalogados en guerra.
“La cantidad de eventos de ataques directos a civiles fue mayor en México y Brasil que en los países en guerra como Ucrania, Myanmar y Siria”, sostiene. Esta situación, precisa, “es un indicativo de que las amenazas que enfrentan los civiles son multifacéticas, están moldeadas por una amplia gama de contextos, perpetradores y modos de violencia”. En el segundo año de pandemia, México ocupó la primera posición como el país con mayor número de eventos en los que los civiles fueron objeto de ataques directos, 5 mil 945 acontecimientos, que en conjunto sumaron 6 mil 609 fatalidades. De ese universo, 5 mil 260 eventos fueron autoría de agrupaciones criminales no identificadas, con 6 mil 254 personas muertas.
Después de México aparece Brasil, con 4 mil 535 eventos teniendo a civiles como blanco; seguido por Ucrania, con 2 mil 993; Myanmar, con 2 mil 703, y Siria, con 2 mil 331.
“A nivel mundial, los civiles continuaron enfrentando varias formas de violencia, perpetradas por una multitud de actores armados. Las amenazas más frecuentes y mortales para los civiles fueron los ataques directos de grupos organizados (…)”.
El documento hace referencia a Myanmar, en donde la junta militar enfrenta la rebelión protagonizada por un abanico de grupos armados; así como a México, Brasil y Colombia, que experimentan intensas luchas entre grupos delictivos antagónicos.
“La violencia sexual, aunque menos denunciada, también representa una amenaza constante para las poblaciones civiles que viven en entornos de conflicto fragmentados”. El documento elaborado por el investigador Timothy Lay sostiene que la guerra iniciada por Rusia en Ucrania ocultó el deterioro generalizado de la seguridad en la mayoría de las regiones del mundo y el aumento sustancial de la violencia política.
La base de datos de ACLED, la cual opera gracias al apoyo financiero de instancias como el Ministerio de Exteriores de Países Bajos, contabilizó 126 mil eventos de violencia política, lo que representa un incremento de 27% en comparación con 2021. Ucrania encabezó la lista, seguido por Siria, Myanmar, Brasil y México, este último con 7 mil 158 casos.
“Esta lista incluye tanto países que sufren conflictos a gran escala, como es el caso de Ucrania, Myanmar y Siria, como a países acosados por guerras de grupos criminales, como México y Brasil, lo que demuestra la diversidad de contextos afectados por altos niveles de política violencia”. Del quinteto, con excepción de México, todos experimentaron un aumento en el número de incidentes. Ucrania presenció el mayor número de fatalidades, 20 mil reportadas, seguida por Myanmar con más de 19 mil, Nigeria con 10 mil 500 y México con aproximadamente 7 mil 750.
Las fuerzas estatales son los principales autores de la violencia política a nivel mundial, seguido por fuerzas extranjeras, grupos rebeldes y agrupaciones anónimas, incluidas las de la delincuencia organizada. “Los grupos armados anónimos o no identificados, incluyendo bandas criminales, continuaron desempeñando un papel sobresaliente en el panorama de la violencia política mundial (…)”.
Asegura que el anonimato de los perpetradores es consecuencia de la falta de información o del esfuerzo de los grupos criminales por desarrollar el perfil incógnito para operar con impunidad. Los grupos anónimos o no identificados suman 43% de los casos globales y 39% de las fatalidades. En cuanto a las protestas en las calles, disminuyeron en 2022, tras años al alza. ACLED registró alrededor de 147 mil, por debajo de las 166 mil del año precedente. Los países que presenciaron más manifestaciones fueron India, Estados Unidos, Paquistán, Francia y México; las naciones más letales para los movimientos de protesta son Irán, Kazajistán, Sudán, Chad y República Democrática del Congo.