Exhorta a las autoridades mexicanas a apoyar estrategias para revertir tendencia; 2022, de los años más mortíferos para el gremio
Ciudad de México/Nueva York.— El representante en México de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Guillermo Fernández-Maldonado, solicitó este martes a las autoridades mexicanas que condenen de forma inequívoca los ataques a la prensa en medio de la ola de violencia que padecen los periodistas en el país.
“Es fundamental que autoridades de todo nivel condenen pública e inequívocamente todo ataque contra la libertad de expresión y apoyen estrategias integrales que reviertan esta grave tendencia”, manifestó el funcionario en la presentación de la quinta edición del Premio Breach/Valdez de Periodismo y Derechos Humanos.
Fernández-Maldonado indicó que la ONU ofrece acompañar al Estado mexicano “en el fortalecimiento de sus capacidades institucionales y en la implementación efectiva de estándares y normas internacionales para la protección de quienes ejercen el periodismo”.
También instó a todos los actores a “sumar esfuerzos” para acabar con las agresiones y la impunidad. “El persistente ataque a periodistas en México y el alto número de asesinatos y desapariciones son motivo de alarma y preocupación, quienes ejercen el periodismo jamás deberían elegir entre ejercer su labor o proteger su integridad y su vida”, agregó.
Este mismo martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador opinó que las Naciones Unidas “no tienen mucha autoridad” para criticar a México después de que el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, cuestionara la poca “firmeza” del gobierno en la lucha contra las desapariciones.
El país más peligroso en AL para los periodistas
El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) indicó en un informe que Latinoamérica, con México a la cabeza, fue el pasado año la región del mundo más mortífera para los periodistas.
Sólo Ucrania, con 15 reporteros muertos, supera la cifra de México (13 asesinados), y a éste le sigue Haití, donde mataron a siete informadores.
En total, 30 periodistas latinoamericanos han muerto violentamente el año pasado, lo que constituye casi la mitad de los 67 a nivel mundial.
Los asesinatos de periodistas en el mundo aumentaron 50% en 2022 respecto del año anterior, alertó el CPJ: 67 homicidios constituye la cifra más alta desde 2018.
En México asesinaron a 13 trabajadores de prensa, de acuerdo con el comité. Otros grupos dicen que la cifra es de 15, que de ser cierto haría de 2022 el año más mortífero para los periodistas mexicanos en las últimas tres décadas.
En Ucrania mataron a 15 periodistas el año pasado. El CPJ pudo confirmar que 41 de los 67 comunicadores fueron asesinados “en relación directa con su trabajo” e investiga los motivos de los 26 restantes.
En México, los asesinatos parecen deberse a una mezcla tóxica de violencia de bandas de narcotraficantes, corrupción política local y falta de castigo a los culpables.