Lamenta violencia contra periodistas y activistas, desapariciones e insuficiente acción ambiental
Estigmatización de activistas y periodistas, represión, abusos por parte de las Fuerzas Armadas, incluyendo la Guardia Nacional, y acciones insuficientes frente a la crisis climática son parte de las carencias que Amnistía Internacional denuncia en México, en su informe anual sobre el estado de los derechos humanos.
“La cifra de homicidios de periodistas continuaba en niveles máximos, y muchas de las víctimas habían recibido medidas oficiales de protección. Al terminar el año se habían registrado más de 109 mil casos de personas desaparecidas y no localizadas”, indicó Amnistía, que denunció un “aumento” de la militarización de la seguridad pública y la consolidación de la participación de las Fuerzas Armadas en las tareas de seguridad pública hasta 2028.
“La Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) figuraban entre las 10 instituciones federales que recibieron el mayor número de denuncias por violaciones de derechos humanos durante el año”, alertó el informe.
En el tema de libertad de expresión, aludió a las críticas del presidente Andrés Manuel López Obrador en sus conferencias matutinas contra periodistas y las organizaciones de la sociedad civil, llamándoles “conservadores y opositores”, Recordó que la víspera del Día Internacional de las Mujeres, López Obrador declaró públicamente que las feministas que iban a manifestarse se estaban preparando con “marros, sopletes y bombas molotov” y que “eso no era defender a las mujeres”, sino una postura conservadora en contra de la política de transformación del gobierno.
En la cuestión ambiental, lamentó la insuficiente acción del gobierno de México. En concreto mencionó el avance en las obras del Tren Maya. “En mayo, un juez federal suspendió la construcción del Tramo 5 del Tren Maya, señalando que ponía en peligro la biodiversidad y los derechos sobre las tierras de los pueblos indígenas que dependían de los frágiles ecosistemas de la selva maya. Pese a ello, el Presidente catalogó el proyecto como de seguridad nacional, lo que permitió que las obras continuaran”.
El reporte advierte que tres años después de que iniciara la pandemia, América Latina aún sufre consecuencias “devastadoras”: una gran recesión económica, gobiernos que no garantizan los derechos básicos y la intensificación de tácticas represivas para acallar las protestas.
AI aseguró que “en la región se produjeron importantes retrocesos en relación con los derechos sexuales y reproductivos” y, en varios países, las autoridades aprobaron medidas que menoscababan el acceso al aborto y prohibían la educación sexual integral.
Amnistía denunció un aumento de la represión en China, incluyendo la censura online, y las medidas restrictivas contra las mujeres en Afganistán, país donde, dijo, los derechos humanos continuaron en caída libre.
