De 2006 a la fecha se han realizado 303 descubrimientos en Jalisco, 76 de ellos en este municipio; en total, en la entidad hay 15 mil 11 desaparecidos
Guadalajara.— El municipio de Tlajomulco de Zúñiga, en el área metropolitana de Guadalajara, se ha convertido en la fosa clandestina del estado con más desaparecidos del país.
Los datos del gobierno federal indican que de 2006 a la fecha se descubrieron 303 fosas clandestinas en Jalisco, donde actualmente hay un registro de 15 mil 11 personas desaparecidas y no localizadas; 76 de esas fosas (una cuarta parte) y mil 366 de esas desapariciones (9%) se concentran en Tlajomulco, cuyo territorio, mayormente rural, se extiende en casi 637 kilómetros cuadrados y lo habitan más de 727 mil personas.
Desde el 1 de enero de 2018 hasta el 31 de marzo pasado, la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas (FEPD) de Jalisco ha documentado el hallazgo de 135 sitios de inhumación clandestina en todo el estado y 60 de ellos (44%) se localizan en Tlajomulco.
De acuerdo con los datos de la FEPD, en estos 135 sitios de inhumación clandestina se ha logrado rescatar los cuerpos de mil 559 personas y 35% de ellos (556 cuerpos) se encontraron en las 60 fosas de Tlajomulco.
Hasta ahora, la fosa más grande localizada en el estado se descubrió en octubre de 2020 en el municipio de El Salto (también en el área metropolitana de Guadalajara y muy cerca de Tlajomulco), de donde se rescataron los cuerpos de 134 personas; sin embargo, en Tlajomulco existen dos fosas llamadas Mirador I y Mirador II de las que hasta ahora se han rescatado los cuerpos desmembrados de 164 personas y ambas están vinculadas por la atrocidad: quienes desaparecieron a estas personas y mutilaron sus cuerpos ocultaron en una fosa la mayoría de los cráneos, las manos o los brazos, y en la otra el resto de los cuerpos.
La fosa Mirador I fue descubierta en noviembre de 2019 y durante un mes los peritos forenses trabajaron en ella y se lograron reintegrar 54 cuerpos, pero decenas de restos permanecían sin corresponder con otros.
En diciembre de 2019 se descubrió la fosa conocida como Mirador II y se trabajó en ella hasta julio de 2020; ahí, los peritos forenses encontraron muchos segmentos que corresponden con los de la fosa Mirador I y hasta ahora se ha logrado la restitución de 110 cuerpos más.
De los mil 559 cuerpos rescatados de las fosas clandestinas de Jalisco, 776 han sido identificados y 783 permanecen como Personas Fallecidas Sin Identificar.
Buscan a sus hermanos
Salvador Munguía desapareció el 21 de octubre de 2019 cuando salió de su casa en Tlajomulco, tenía 28 años, era diseñador gráfico y cuando no volvió, su familia comenzó a buscarlo, lo reportó como desaparecido y acudió en varias ocasiones al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) para ver las fotografías de los cuerpos que ingresaban.
En febrero de 2020, Adriana, una de las hermanas de Salvador, acudió al IJCF y le mostraron algunas fotos de los restos que se habían rescatado de las fosas Mirador I y Mirador II; entre ellas reconoció parte del cuerpo de su hermano y durante un año y 10 meses observó más fotografías, pidió confrontas genéticas, llevó un registro detallado de los códigos con los que se clasificaban las partes del cuerpo de su hermano y logró recuperar a Salvador.
Brenda Robles también busca a su hermano, Víctor, de quien supo por última vez el 31 de diciembre de 2019; tenía 36 años cuando desapareció, vivía en el fraccionamiento Real del Valle, en Tlajomulco y trabajaba anunciando los derroteros de los camiones que llevan a la cabecera municipal.
Ante los pocos avances de las investigaciones por parte de las autoridades, Brenda ha ido tratando de averiguar qué pasó entre el último día de 2019 y el 11 de enero de 2020, cuando su cuñada le llamó para avisarle que le habían dicho que unos sujetos armados se llevaron a Víctor.