Académicos coincidieron en que los líderes de cada bloque se han cerrado a la posibilidad de que haya participación ciudadana en la toma de decisiones internas para las elecciones 2024.
En el proceso de selección de los candidatos presidenciales del 2024 se impondrá el ‘dedazo’ de los dirigentes de los partidos de la coalición Va por México y del presidente Andrés Manuel López Obrador en Morena, anticiparon académicos.
Advirtieron que la cerrazón de los liderazgos a la participación ciudadana en la toma de decisiones internas de los partidos ha llevado a las fuerzas políticas a una grave crisis de credibilidad, porque “se están alejando cada vez más de las formas medianamente democráticas”.
“Es el retorno a los mecanismos de elección de una sola persona: en Morena se impuso a Delfina Gómez en el Estado de México por quien controla al partido, que es el Presidente, y en 2024 el resultado de la encuesta de Morena va a ser la persona más cercana al corazón del Presidente”, expuso Karolina Gilas, de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM.
Al participar en el Seminario Candidatos y Elecciones 2023-2024, Métodos de Selección de Candidatos, que organizó el Centro de Estudios Internacionales de El Colegio de México, planteó también que “en el bloque opositor de Va por México para el 2024 dudo que haya una consulta abierta, más bien será una resolución interna de los propios partidos PAN, PRI y PRD”, porque “se están alejando cada vez más de las formas medianamente democráticas”.
Joy Langston, académica del Colegio de México, expuso que las cosas no han cambiado ni van a cambiar en estos procesos, porque “en los partidos aún las nominaciones conllevan dinero, millones de recursos públicos y carreras políticas” y “todo se dará entre disputas de grupos políticos”.
“La definición de las candidaturas será en función de quienes favorecen los intereses de las dirigencias de los partidos en turno y de quienes garanticen una disciplina dentro de las cámaras del Congreso”, porque “nos mantenemos en la tendencia de una centralización y el cierre de los partidos. A mayor control de las dirigencias, mayor disciplina en las cámaras”, dijo.
Estimó que “la nula participación ciudadana lleva a partidos a una grave y profunda crisis de credibilidad y cada vez son menos representativos”, anotó.
Rogelio Hernández, de El Colegio de México, anticipó que “el PRI va a perder el Estado de México, porque el gobernador Alfredo del Mazo no está bien evaluado, y será particularmente doloso para este partido, que ha dejado de tener también el apoyo público del sector empresarial del estado”.
Sin embargo, aclaró que aunque esta victoria “dejará una imagen de una alta fortaleza del Presidente y de su partido Morena” y “pondrá en entredicho la existencia del PRI”, “eso no va a definir el triunfo de Morena en el 2024″, ya que “el partido tendrá que demostrar antes su capacidad política de mantener el control de los grupos políticos en un estado altamente conflictivo”.