Aprende cómo reciclarlo
Reutilizar el aceite para freír puede comprometer tu salud a largo plazo. En vez de reutilizarlo, aprende a reciclarlo para cuidar de tu salud y cuidar del planeta.
El uso del aceite para freír es practicado en millones de cocinas alrededor del mundo, y surge la pregunta sobre si es posible reutilizarlo de manera segura. Algunas personas piensan que reutilizar el aceite es una práctica viable, siempre y cuando se sigan ciertas pautas, como filtrarlo y almacenarlo de manera adecuada.
Por otro lado, existen preocupaciones sobre la calidad del aceite usado, como la acumulación de compuestos dañinos y la degradación de los nutrientes. En este artículo, conocerás si es posible o no reutilizar el aceite para freír de manera segura y algunas formas en las que puedes reciclarlo.
Reutilización del aceite para freír
La reutilización del aceite para freír ha sido objeto de debate, y existen diferentes opiniones sobre su viabilidad. Antes de considerar la reutilización del aceite, es importante tener en cuenta varios factores.
Entre ellos se encuentran la calidad inicial del aceite, el tipo de alimentos que se han cocinado en él y el método de almacenamiento utilizado.
De hecho, un informe publicado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) de España explica algunas pautas que se deberían seguir en orden de poder reutilizar el aceite hasta 25 veces. Entre ellas se encuentran: no dejar enfriar el aceite, que la temperatura no sobrepase los 180° C, utilizar una freidora y freír de manera continua.
Sin embargo, es importante destacar que estas indicaciones resultan difíciles de seguir para la mayoría de los consumidores en sus hogares. La realidad es que las personas no cuentan con equipos especializados ni con la capacidad de controlar de manera precisa la temperatura de cocción ni de llevar a cabo un proceso de fritura continua.
Además, es relevante tener en cuenta que cada vez que se reutiliza el aceite, aumenta el riesgo de degradación y acumulación de compuestos dañinos. Aunque se sigan las recomendaciones mencionadas, la calidad y la seguridad del aceite pueden disminuir con el tiempo y el uso repetido.
¿Es seguro para la salud reutilizar el aceite?
La pregunta sobre si es seguro reutilizar el aceite para freír es crucial cuando se considera su uso en la cocina. Si bien existen diferentes perspectivas sobre este tema, es importante tener en cuenta las razones que sustentan la postura de que no es saludable reutilizar el aceite. A continuación, conoce algunas de estas razones.
Acumulación de compuestos dañinos
Con cada uso, el aceite se expone a altas temperaturas y se produce una degradación química. Esta degradación puede resultar en la formación de compuestos tóxicos y dañinos, como la acrilamida, que según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, aumenta el riesgo de sufrir varios tipos de cáncer.
Asimismo, a medida que el aceite se calienta en repetidas ocasiones, se producen radicales libres. Estos radicales libres son capaces de degradar las células de nuestro organismo, deteriorando en consecuencia nuestra salud y haciéndonos más propensos a sufrir de enfermedades.
Todo esto ocurre cuando se fríe a temperaturas mayores de los 100 °C, a la cual es sencillo llegar y traspasar al momento de freír algo en nuestros hogares.
Aumento del contenido de grasas trans
El calentamiento y la reutilización de grasas y aceites comestibles generan cambios químicos, como la formación de ácidos grasos trans (TFA, por sus siglas en inglés) que están relacionados con las enfermedades cardiovasculares.
De hecho, un estudio publicado en la revista Food Chemistry investigó el efecto del calentamiento/fritura en la formación de TFA en seis tipos comunes de grasas/aceites en la India. Se midió el TFA antes y después de calentar/freír a diferentes temperaturas. Todos los aceites/grasas mostraron un aumento en los TFA, ácidos grasos saturados y una disminución en los ácidos grasos insaturados.
Mayor absorción de compuestos tóxicos
Cuando se utiliza aceite reutilizado en la fritura de alimentos, este se impregna más en el nuevo alimento, lo que resulta en un incremento en su contenido graso. Al mismo tiempo, se introducen compuestos tóxicos en el producto final que vamos a ingerir, aumentando la posibilidad de que penetren en nuestro organismo.
Con cada ciclo de reutilización, tanto el número de compuestos tóxicos como su capacidad de penetración en los alimentos se incrementan, generando una mayor contaminación en nuestra comida.
Estas son algunas de las razones por las que no deberías reutilizar el aceite para freír, sobre todo si se trata de la fritura de distintos tipos de alimentos que necesitan temperaturas diferentes para lograr su cocción.
A ello podemos sumarle el riesgo de sufrir una reacción alérgica o intoxicación alimentaria al estar expuestos a alimentos que han pasado por el mismo aceite que ya ha sido utilizado para freír alimentos alérgenos o sensibles.
Si se trata de freír diferentes tipos de alimentos con requerimientos de temperatura distintos, es recomendable optar por aceite fresco en cada ocasión para asegurar una cocción adecuada y evitar la acumulación de compuestos dañinos.
¿Cómo reciclar el aceite usado?
En lugar de verter el aceite usado por el desagüe o tirarlo a la basura, el reciclaje ofrece diversas formas de aprovechar este recurso y reducir su impacto negativo en el entorno. El aceite usado, si se gestiona de manera correcta, puede ser reciclado y transformado en productos útiles. Conoce algunas formas de reciclarlo a continuación.
Haz jabón
La fabricación de jabón con aceite usado implica mezclar el aceite filtrado y limpio con sosa cáustica en una proporción adecuada. Este proceso, llamado saponificación, convierte el aceite en jabón al unir las moléculas de ácidos grasos con las moléculas de sosa cáustica.
Una vez que se completa la saponificación, se pueden agregar ingredientes adicionales, como aceites esenciales, y la mezcla se vierte en moldes para su curado durante varias semanas. Al finalizar el proceso, se obtiene jabón casero natural y respetuoso con el medio ambiente.
Crea velas decorativas
La fabricación de velas con aceite usado es un proceso sencillo y creativo. Para comenzar, se crea una base en espiral con alambre, dejando un tramo ascendente para sujetar el hilo de algodón. Esta base se coloca en el centro del recipiente seleccionado.
A continuación, se llena el recipiente con el aceite usado previamente filtrado, asegurándose de cubrir la mecha de algodón. Si se desea, se pueden añadir unas gotas de aceite aromático para darle fragancia a las velas. Una vez completado, el resultado es una vela reciclada lista para ser encendida y disfrutada.
Este proceso ofrece una forma ecoamigable de aprovechar el aceite usado, reduciendo los residuos y brindando velas personalizadas y respetuosas con el medio ambiente.
Engrasa los moldes de tus postres
Los moldes utilizados para hacer bizcochos, galletas y demás preparaciones en el horno, pueden ser untados con aceite previamente filtrado para facilitar que los alimentos salgan más rápido y sin problema. Para hacerlo, solo necesitarás filtrar el aceite y untarlo de forma leve con un pincel de cocina sobre el molde y luego verter la mezcla de la preparación.
Crea una lámpara de aceite
Puedes crear una lámpara de aceite utilizando un recipiente resistente al calor, una mecha y el aceite usado como combustible. Llena el recipiente con el aceite y sumerge la mecha en él. Enciende la mecha y tendrás una lámpara casera que será útil en situaciones de emergencia o para iluminación decorativa.
Es necesario mejorar nuestros hábitos de consumo
En un mundo donde la sostenibilidad y la preservación del medio ambiente son cada vez más importantes, es fundamental reflexionar sobre nuestros hábitos de consumo, incluyendo la forma en que tratamos el aceite usado. La reutilización y el reciclaje del aceite para freír son prácticas que nos invitan a reconsiderar la manera en que manejamos este recurso y los impactos que generamos en nuestro entorno.
Al explorar la posibilidad de reutilizar el aceite para freír, encontramos que existen factores a considerar y limitaciones que nos hacen cuestionar si es seguro o adecuado para nuestra salud y el medio ambiente. Si bien algunos expertos y estudios ofrecen pautas y recomendaciones para su reutilización, es importante tener en cuenta las limitaciones y los riesgos asociados.
Por otro lado, el reciclaje del aceite usado ofrece alternativas creativas y respetuosas con el medio ambiente, como la fabricación de jabón y velas. Estas formas de reciclaje no solo nos permiten darle una segunda vida al aceite, sino que también fomentan la reducción de residuos y el uso de productos más naturales y sostenibles.