¿Asegura que Marx Arriaga, director de Materiales Educativos de la SEP, no tiene la experiencia suficiente; contrató a un venezolano que trabajó con Maduro, acusa
El presidente Andrés Manuel López Obrador dejó en manos de un grupo comunista de la Secretaría de Educación Pública (SEP) la educación, que no tiene nada de humanista y eso es irresponsable, dice el padre Mario Ángel Flores Ramos, exrector de la Universidad Pontificia de México y actual director del Observatorio Nacional de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).
“El Presidente entregó lo más delicado para toda la sociedad, que es la educación, a un grupo radical de marxistas. ¿Qué no se está dando cuenta de lo que está haciendo? Hay tantos grupos dentro del actual gobierno, pero, ¿cómo fue posible que le entregara a éstos, el grupo más impresentable, la educación? Lo más sagrado, lo más importante y trascendental para una sociedad. ¡Eso es imperdonable para quien está al frente de este país!”, señala en entrevista con EL UNIVERSAL.
Asegura que el director de Materiales Educativos de la SEP, Marx Arriaga Navarro, no cuenta con la experiencia suficiente para haber tenido a su cargo la creación de los nuevos libros de texto.
“Él no es una persona adecuada como para haber sido el gran editor de los textos para la formación de la niñez y de los adolescentes. Por ningún lado tiene ese currículum. Y él contrató a un venezolano [Sady Arturo Loaiza Escalona], quien estuvo a cargo de algunos procesos educativos trabajando para el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. Tampoco él era la persona adecuada para hacerse cargo de algo tan importante en nuestro país como es la elaboración de los libros de texto gratuitos”, opina.
“¿Cómo ha visto a la secretaria de Educación ante toda esta controversia?”, se le pregunta.
“Desafortunadamente, no es la que está tomando las decisiones, no es secretaria de Educación Pública, simplemente. Está colocada en un puesto donde no la dejan actuar. Cuando ella llegó a ese puesto el proceso para la elaboración de los libros ya estaba en camino. Ella no ha intervenido para nada. Debería alzar la voz porque está puesta como responsable de la educación pública, no la que le hace la tarea sucia a otros personajes. Tal vez es lo que no entiende, porque no la hemos visto actuar”, responde.
Dice que es absolutamente irresponsable que aun cuando al gobierno sólo le queda poco más de un año en el poder, esté presentando la llamada Nueva Escuela Mexicana, que no tiene pies ni cabeza.
“Este es un gobierno que va de salida y que ya nadie lo quiere más, pero se le ocurre hacer una nueva estrategia educativa que carece de planes de estudio, que no ha capacitado a los docentes. Esta es una verdadera irresponsabilidad que no debemos permitir”, menciona.
Ramos Flores considera que los nuevos libros de texto gratuitos, que serán entregados al inicio del ciclo escolar 2023-2024 a más de 25 millones de estudiantes de educación básica, han generado un malestar generalizado por haberse realizado al margen de la sociedad.
“Este malestar ha ido creciendo por la manera de hacer las cosas de este gobierno, que todo lo hace al margen de la sociedad. Y sólo manejando su propia ideología y, además, con el poder que tiene, resguardando toda la información relativa a los planes y programas de estudio, así como de los libros de texto gratuitos por cinco años. Esto es inaceptable”, opina.
Para el padre Mario Ángel es tal la controversia que han desatado los ejemplares, que incluso algunos docentes ya han comenzado a manifestarse contra este nuevo modelo educativo, que se implementará a partir del 28 de agosto próximo.
“Los maestros se habían mantenido en silencio porque, claro, tenían el temor a ser despedidos, pero al ver que han ido creciendo las protestas por parte de los académicos, de las organizaciones de padres de familia, de la sociedad civil, ya han empezado a reaccionar vertiendo sus opiniones sobre esos libros, aunque, eso sí, los grandes sindicatos magisteriales han preferido guardar silencio”, agrega el sacerdote.
Asegura que el centro de la educación debe ser la persona, en este caso los niños y adolescentes, por lo que exhorta al gobierno federal a llegar a acuerdos para beneficio de la sociedad.
“No podemos poner en lugar de la persona una ideología, porque ya empezamos a equivocar todo el proceso. El gobierno no es el dueño de la educación, es el coordinador de la sociedad para ofrecer lo mejor a los niños, jóvenes y adolescentes”, añade.
Señala el clérigo, con más de 40 años en el servicio sacerdotal, que existe cerrazón por parte del gobierno federal para escuchar a quienes se han pronunciado en contra de los nuevos libros de texto gratuitos, por lo que considera necesario recurrir al Poder Judicial.
“Cuando existe esa cerrazón, cuando no se escucha, cuando no hay diálogo, queda el Poder Judicial como un recurso necesario para crear ese ambiente de diálogo que necesitamos”, expone.