J. LUIS SEEFOÓ LUJAN // ¿Planeación o Negocios Inmobiliarios en Zamora, Michoacán?

Este texto tiene por objeto ofrecer elementos para mostrar dudas, suficientemente sólidas, en relación al aviso público del “inicio del proceso de planeación para la modificación total (actualización) del programa municipal de desarrollo urbano de Zamora” y respecto a “la convocatoria al foro ciudadano en la etapa de diagnóstico para la modificación total del programa municipal de desarrollo” en el municipio de Zamora, Michoacán

Me refiero al comunicado que Carlos Albert Soto Delgado, presidente municipal, y Felipe Armando Umaña Melo, secretario, publicaron en algunos periódicos y redes sociales a efecto de llevar a cabo el llamado “Foro Ciudadano” el miércoles 31 de mayo de 2023 en el segundo patio de las instalaciones del Palacio Municipal de Zamora, Michoacán.

Reitero, el escrito no tiene la finalidad de fastidiar a las autoridades locales ni a los funcionarios que ahora y hace años promovieron “la actualización del plan de desarrollo”, mismos que se constituyeron en gestores gubernamentales de Liverpool y de otros negocios inmobiliarios y que han marcado huella en la destrucción del suelo agrícola de este municipio.

El promocional gubernamental para revisar y actualizar el Programa de Desarrollo Urbano de Zamora 2008-2028 reactiva interrogantes ya planteadas desde entonces. La iniciativa de José Alfonso Martínez Vázquez, alcalde, y del arquitecto Francisco Avalos Bolaños, director de desarrollo urbano y planeación, destinaba 1,250.77 hectáreas para crecimiento urbano habitacional proyectadas a corto, mediano y largo plazo y estimaba una  densidad media de   habitantes 84.18 por hectárea.  En consecuencia, 1250.77  darían cabida a  105,289.8 personas más.

Mi alegato se sustenta en dos puntos: uno) la dinámica poblacional de Zamora no demandaría un espacio de tales dimensiones para asentarse. Tanto el crecimiento vegetativo como el saldo migratorio sugieren un  “aplanamiento” de la curva demográfica, no incrementos como los observados en los años setenta; y, dos) la autoridad, transgrede -sin necesidad- la normatividad básica (Código de Desarrollo Urbano). Remarco “sin necesidad” porque cualquier  propuesta del alcalde sería aprobada por el cabildo sin una oposición que ponga en riesgo los acuerdos formales que sean  necesarios para el capital inmobiliario.

¿Qué tanto crece la población en Zamora?

Las cifras poblacionales contradicen el imaginario social que se construye el dibujo de “una gran ciudad”. La idea desproporcionada del “crecimiento demográfico” es útil para justificar la alteración medioambiental, la saturación vehicular, la escasez de agua, la inseguridad, etc. Los políticos recurren a esa imagen para deslizar responsabilidad: “es que somos muchos”.

Antes de avanzar en este razonamiento, aclaro: no afirmo que la población de Zamora está estancada, no digo que no crece, sólo leo en los censos que un aumento de 53.68%, experimentado de 1960 a 1970, en las condiciones agro comerciales e industriales de ahora, no se volverá a repetir. Cada decenio, a partir de 1970, marca un porcentaje menor hasta llegar a 10% en el tránsito de 2010 a 2020 (Tabla 1).

Tal decremento decenal también se lee en las tasas de crecimiento decenal que de 4.60, el mayor de la historia en 1970 bajó a 3.18 en 1980 y en la actualidad es menor a la unidad: 0.96 en 2020 (Tabla 1).

De manera parecida, los municipios vecinos con los cuales la vida agrícola y comercial es una sola, la población crece despacio o decrece, como Jacona con la cual se signó hace muchos años la formalización de conurbación y con Tangancícuaro que, al integrarse, es parte de una  metrópoli. Unos y otros no crecen como lo hicieron cuando la región irrumpió como fresera.

Transgresión de la normatividad básica

Dada la buena relación del alcalde con los partidos que le acompañan, es de esperarse que ningún regidor objetará las iniciativas que presente al cabildo; ni PRI, PD o Morena cuestionarán nada. Con la excelente disposición de los regidores, ¿Por qué no integraron la comisión municipal del desarrollo (COMUDE) oportunamente y a modo? Con tan buenos oficios, ¿por qué no elaboraron el diagnóstico previo del Plan 2008?  Con seguridad existen despachos (agencias consultoras) capaces de firmar los dictámenes en el sentido que los necesiten.

De igual manera, con las “fuerzas vivas” (representantes de colonias, jefes de tenencia, directivos de centros escolares “no conflictivos”, etc.) pueden montar la farsa de “foros” donde el pueblo opina, etc. Pero no quieren cumplir ni las normas mínimas a sabiendas que no habrá quien les cuestione

Si a esto agregamos los aplausos mutuos entre el gobernador de Michoacán (Morena) y el alcalde zamorano (PAN) más el beneplácito del Arq. Miguel Angel Sandoval Rodríguez (Sedatu, Morena) y el hecho de que la empresa Conurba sea la encargada de llevar a cabo la promoción y estudios en 5 municipios para la mentada actualización del plan de desarrollo urbano, la escasa transparencia del proceso alimenta la duda.

Todo sugiere que esta “actualización” del plan de desarrollo urbano en Zamora (y en Jacona) es la reactivación de negocios inmobiliarios.

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JOSÉ LUIS SEEFOÓ LUJÁN

Dr. José Luis Seefoó Luján. Investigador en el Colegio de Michoacán. Normalista rural en los años sesenta, realizó estudios de economía en la Universidad Autónoma de Nayarit.

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