Multitud de mártires católicos asesinados durante la guerra civil Española.
Pablo Hertfelder Garcia-Conde
(ZENIT Noticias / Alcalá de Henares).- Se conmemora el 87 aniversario del martirio de 143 Beatos en Paracuellos del Jarama, celebración que ha contado con la participación de Mons. Antonio Prieto, sucesor de Mons Antonio Reig Plá, al frente de la diócesis de Alcalá de Henares.
El acto ha contado con la presencia de familiares de multitud de víctimas que fueron asesinadas por el mero hecho de ser católicos: desde religiosos, laicos y hasta niños que se encuentran enterrados en ese cementerio tan significativo durante la guerra civil española, durante la cual el bando republicano fusiló a mansalva a multitud de personas sólo por ser católicos.
Años atrás, el Obispo emérito de Alcalá de Henares, D. Juan Antonio Reig Plá, había presidido esta misa en conmemoración por las víctimas de lo que él denominaba “Terror rojo”. Ahora el nuevo obispo de Alcalá ha recogido el testigo y ha continuado con esta tradición tan querida por el pueblo de Paracuellos y en especial los familiares de las víctimas que siempre se hacen presentes en este día y acuden al llamado del obispo para conmemorar la vida de los mártires y beatos realizando una procesión y bendiciendo las tumbas y culminando con la celebración de la Santa Misa.
La Historia de los fusilamientos de Paracuellos del Jarama.
En la Guerra Civil española, durante la batalla de Madrid de 1936, varios miles de prisioneros fueron asesinados en el paraje del Arroyo de San José, en Paracuellos de Jarama. Las matanzas se realizaron con ocasión de los traslados de presos, conocidos como “sacas”, desde diversas cárceles de Madrid, entre el 7 de noviembre y el 4 de diciembre de 1936. Muchas de aquellas víctimas fueron asesinadas únicamente como consecuencia de su fe católica y en el contexto más amplio de la persecución religiosa que venía dándose en España desde años atrás. Al finalizar la guerra, aquel paraje fue progresivamente dignificado construyéndose allí una pequeña iglesia y dando lugar a lo que hoy conocemos como Cementerio de los Mártires de Paracuellos. Dicho Cementerio está custodiado por la Hermandad de Ntra. Sra. de los Mártires de Paracuellos, asociación de fieles católicos perteneciente a la Diócesis de Alcalá de Henares.
Según consta en los archivos, son miles las víctimas inocentes, centenares de ellas menores de edad, cuyos restos descansan en aquel Camposanto. De entre dichas víctimas hay sacerdotes y seminaristas de, al menos, ocho arzobispados y diócesis: Archidiócesis de Madrid, Arzobispado Castrense, Archidiócesis de Toledo y las Diócesis de Getafe, Ciudad Rodrigo, Jaén, Lugo y naturalmente Alcalá de Henares.
Allí también reposan los restos mortales de centenares de religiosos pertenecientes a al menos, a 20 órdenes religiosas: Agustinos, Capuchinos, Carmelitas, Carmelitas Descalzos, Claretianos, Dominicos, Escolapios, Franciscanos, Hermanos de las Escuelas Cristianas, Hospitalarios de San Juan de Dios, Jerónimos, Jesuitas, Marianistas, Maristas, Misioneros Oblatos, Paules, Pasionistas, Redentoristas, Sagrados Corazones de Jesús y María y Salesianos
De entre estos religiosos ya han sido beatificados por el papa San Juan Pablo II, el papa Benedicto XVI y ahora el papa Francisco, 143 mártires: 63 religiosos Agustinos, 22 Hospitalarios de San Juan de Dios, 13 Dominicos, 6 Salesianos, 15 Misioneros Oblatos, 3 Hermanos Maristas, 1 sacerdote de la Orden de San Jerónimo, 1 Capuchino, 1 religioso de la Orden del Carmen, 9 Hermanos de las Escuelas Cristianas (La Salle) y 9 miembros de la Familia Vicenciana.