Jaime Ramos Méndez
(Tomado de Facebook)
Este día se recuerda el aniversario luctuoso de Fray Jacobo Daciano quien un 29 de Octubre de 1567 fallece en Tarecuato con fama de santidad; no se conoce ni se tiene información de su tumba y de sus restos son ya un misterio; sobre eso hay muchos mitos y leyendas como la del naranjo que se encuentra en el patio del antiguo ex convento de Santa María, actualmente a un costado del templo de Tarecuato; se cuenta que de bastón seco que dejo plantado en ese lugar florece el naranjo y este después de su muerte empezó a crecer y a brotarle ramas para llegar al tamaño que se encuentra en la actualidad.
Fray Jacobo Daciano, nació en Dinamarca el año de 1484, hijo del rey Juan I de Dinamarca y la reina Cristina. Fraile franciscano que en su misión evangelizadora aprendió la lengua originaria (purhepecha).
Promoviendo y defendiendo para que los indígenas pudieran ser ordenados sacerdotes. Defensor más radical ya que no solo intentó limitar los abusos de la colonización sino que le quitó toda legitimidad religiosa al afirmar la igualdad de «razas humanas»; la declaración: «Del pueblo bárbaro de los indios que habiendo recibido el bautismo desean recibir los demás sacramentos» eran la base de una «iglesia indiana/indígena» que se realizará mucho tiempo después. En 1919 el papa Benedicto XV ratificó las ideas de Fray Jacobo Daciano en la encíclica «Maximum Illud».
De haber triunfado las tesis del fraile Daciano en la época, la historia de todo el continente hubiera sido otra.
Fray Jacobo fue el fundador de Zacapu que este día recuerda su memoria el día 29 de junio y en Tarecato el día de hoy 29 de octubre.
Nota: Dinamarca en latín se dice Dacia, o sea, que decir Jacobo Daciano es lo mismo que decir Jacobo de Dinamarca.
