Esta temporada invernal hay un incremento de familias que llegan a trabajar y vivir en la frontera de Ciudad Juárez; indígenas sufren muchos abusos
Ciudad Juárez.— Las bajas temperaturas que se han registrado en diversas zonas de la Sierra Tarahumara de Chihuahua, de hasta -12 grados, agudizan otros problemas sociales que se viven en las comunidades, lo que provoca que familias rarámuris dejen sus pueblos originarios para llegar a Ciudad Juárez en busca de una mejor calidad de vida.
Rosalinda Guadalajara, activista y defensora de derechos de las comunidades indígenas en Ciudad Juárez y exgobernadora de la colonia tarahumara, relató en entrevista con EL UNIVERSAL que esta migración se registra cada año; sin embargo, en esta temporada se ha visto un mayor incremento de familias de diversos pueblos de la sierra que llegan a trabajar y vivir a esta frontera.
Explicó que la mayoría son originarios del municipio de Carichí y los siete pueblos que están dentro de esta zona, así como de regiones del municipio de Cuauhtémoc.
La activista explicó que el frío es un factor que se suma a la falta de alimentos, empleo y servicios básicos, lo que complica la subsistencia. Indicó que durante el verano pasado en algunas regiones no se logró la cosecha de maíz y otros alimentos, lo que ahora los obliga a dejar sus hogares, pese a que han recibido ayuda.
“Desde hace como un mes se ha notado que gente de la sierra ha bajado mucho… al no lograrse la cosecha, porque muchos comentaron que hicieron sólo una pizca de maíz, mucha gente se ha salido de ahí a buscar trabajo, y también por el frío”, detalló Rosalinda.
Al llegar a Ciudad Juárez la situación también es complicada. La comunidad rarámuri se asienta en colonias y zonas donde hay más población de la Tarahumara. Algunos se quedan con familiares, conocidos o donde logran establecerse en tanto consiguen empleo.
“Es el frío, la falta de alimentación en su pueblo, es por eso que salen, para tener dónde comer y estar mejor por los tiempos. Aquí [en Ciudad Juárez] hay dos [colonias tarahumaras], una a la salida de la carretera Casas Grandes y otra en el cerro Lea la Biblia. Ahí es donde se ha notado en estos días que ha llegado mucha familia”, explicó la activista.
Señaló que llegan completas, ya sea para pasar la temporada o para vivir de manera permanente, por lo cual no se tiene un estimado de cuántas serían debido a que muchas de las familias están dispersas.
“Este año se ha visto más. Cada año salen familias, pero este año se ha notado más”, aseguró.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), para este jueves las temperaturas más bajas en el país serán de entre -10 y -5 grados en la Sierra de Chihuahua y Durango.
Víctimas de abusos
Rosalinda Guadalajara explica que esta población es blanco frecuente de abusos, por lo que aun y con apoyos asistenciales, muchas veces se ven imposibilitados para cobrar pensiones y becas, entre otros beneficios públicos.
“Hay personas que por no saber el idioma [español] prestan su tarjeta para que les saquen el apoyo y son víctimas de abuso; otros les cobran por sacar el dinero. Hay adultos mayores que no saben cuánto es lo que reciben”, resaltó la activista.
En Ciudad Juárez, el mayor número de personas de la población indígena se observa en la zona Centro, en donde hay habitantes de diversas partes de la Sierra Tarahumara pidiendo dinero, vendiendo dulces, artesanías y hierbas.
En los recorridos realizados por este diario se ha constatado que algunas personas hablan pocas palabras en español, ya que conservan su idioma natal.
Una originaria de la Sierra Tarahumara es Teresita, quien cuenta que llegó a Ciudad Juárez desde Guachochi. Dice que dejó su lugar de origen hace unos cinco años por el frío, la falta de alimentos y de trabajo. Desde entonces se gana el sustento en esta ciudad con la venta de hierbas y pañuelos bordados.
Ayuda asistencial
Para amortiguar la falta de alimentos y la situación que vive la población de diversos pueblos rarámuris, se creó la estrategia integral contra la sequía que aplica el gobierno del estado, con la que han dado apoyos asistenciales.
En días recientes personal de diversas dependencias llevó a habitantes de cinco comunidades de Carichí más de 32 toneladas de paquetes alimenticios; las autoridades aseguraron que esto beneficiaría a más de 400 familias.
También se informó que se entregarán alrededor de 96 toneladas de granos básicos a mil 200 familias en condición de vulnerabilidad.
Acciones similiares se han llevaco a cabo en otras regiones de la Sierra Tarahumara, como Matachí, Nonoava, Guerrero, Temosachi, Bocoyna, Uruachi, Moris y Batopilas.
Sin embargo, esto no es suficientes para detener la migración.