La muerte del niño Dante Emiliano, en el municipio de Paraíso, Tabasco, se suma a los 6.7 asesinatos dolosos y culposos que se registran al día contra personas de cero a 17 años de edad
Durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, se han registrado 12 mil 368 homicidios contra personas de cero a 17 años de edad, de los cuales 4 mil 116 (3 mil 464 hombres y 652 mujeres) fueron con arma de fuego, de acuerdo con cifras procesadas por la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
El asesinato de Dante Emiliano, de 12 años, ocurrido el miércoles en el municipio de Paraíso, Tabasco, se sumó a los 6.7 homicidios dolosos y culposos que diariamente se registran contra menores de edad.
De enero a marzo de 2024, el reporte de la Redim destaca que los estados con mayor cantidad de homicidios con arma de fuego de personas de cero a 17 años fueron Guanajuato, con 31; Estado de México, con 18, y Jalisco, con 14. Agrega que estas entidades se concentró uno de cada tres homicidios con arma de fuego de niños y adolescentes en el país.
“De enero a marzo de 2024 se han registrado más homicidios con arma de fuego de niños y adolescentes en México que la cantidad total de homicidios intencionales registrados en todo un año en países enteros como Israel, que se encuentra en un conflicto armado”, resalta el reporte de la ONG.
Juan Martín Pérez, coordinador regional de Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe, comenta que todos los delitos contra la niñez y la adolescencia alcanzan una impunidad de 97%.
Comenta que la muerte de Dante Emiliano está vinculada con la estrategia de seguridad de este gobierno y con la militarización.
“Tenemos un elemento contextual, que es la guerra contra el crimen. Eso, en términos concretos, se traduce en la militarización del país. Y ahora, de parte de los grupos criminales se crean ejércitos privados y lo paramilitar comienza a ser un eje base de los grupos criminales, que se vinculan con las autoridades en redes de macrocriminalidad para tener impunidad”, asevera.
Menciona que actualmente se calcula que circulan por todo el territorio nacional más de 16 millones de armas ilegales, provenientes principalmente de Estados Unidos y Centroamérica.
“Hasta el momento desconocemos si quienes atacaron a Dante Emiliano son parte de una célula criminal, pero en realidad ya en cualquier acontecimiento de conflicto vecinal, familiar, de crímenes de orden común portan cada vez más armas, porque están disponibles”, agrega.
Resalta que en los hechos “la dinámica de guerra fragiliza al Estado y a las instituciones. Y ya son tantos casos, porque ahorita estamos hablando del homicidio de Dante Emiliano, pero hay que agregarles las desapariciones, las masacres. Entonces, las autoridades ya no investigan, simplemente levantan los cuerpos y ya están listas para el siguiente caso. Ya también saben administrar el impacto mediático con el mantra que les funciona, ‘presuntos vínculos con el crimen’ y se acaba la indignación pública y nos preparamos para el siguiente drama”.
Considera que la violencia contra la niñez y la adolescencia en México “es tristemente normal. Ahorita es Dante Emiliano, pero si vemos hacia atrás tenemos muchas víctimas en todos estos años, sólo cambia el nombre y la indignación está ahí, pero se normaliza la violencia. Se convierte en unos clics, en un espectáculo, pero las autoridades no se ven obligadas a cumplir con la ley para prevenir y garantizar el derecho de los niños a una vida libre de violencia”.
El reporte de la Redim resalta que, de enero de 2015 a marzo de 2024, 5 mil 377 personas de cero a 17 años han sido víctimas de lesiones con arma de fuego a nivel nacional, 941 mujeres y 4 mil 436 hombres.
Para la directora de Redim, Tania Ramírez, México lleva varios años sumido en una crisis de seguridad y de violencia armada.
“En realidad la violencia viene de mucho atrás y creo que eso es importante para las organizaciones decirlo, pero tampoco en los últimos años se ha determinado resolver este problema, que está invisibilizado en esta extraña crisis sostenida”, refiere.
Señala que la próxima presidenta de la República, sea del color que sea, debe reconocer que “hay un problema con los homicidios de niños y adolescentes, pero con un enfoque de derechos de infancia. Además, tendrá que recurrir a las soluciones que ya están construidas y que tienen que ver con los sistemas de protección”.
Para Patricia Olamendi, fundadora de la organización Nosotras Tenemos otros Datos y vicepresidenta de la Asociación de Doctores en Derecho, los grupos vulnerables de la población son los que enfrentan una mayor violencia y son la mayor parte de las víctimas de la crisis de inseguridad del país.
“Este es un Estado que no tiene futuro. Estamos ante situaciones muy graves donde los grupos más vulnerables, como los niños, los adolescentes y las mujeres, son víctimas de esta situación tan grave que estamos viviendo en el país. Lamentablemente, no somos importantes ni para la autoridad ni para la sociedad. Muestra de ello es esta situación de muertes, de abusos, de violencias, que no se da ni siquiera en las guerras”, externa.
Asegura que México tiene un Estado de derecho donde se pueden tener abusos tan abiertos, tan brutales, tan cotidianos y tan permanentes que dejan en estado de indefensión a los grupos más vulnerables, “y nos la pasamos denunciando y denunciando, pero lamentablemente no tenemos ninguna respuesta de la autoridad”.
Y añade: “No hay un solo programa dirigido a la prevención de la violencia para la niñez, para la adolescencia y las mujeres. No existe un solo programa para abatir la impunidad. Ya es un nivel de desesperación porque no hay nada, absolutamente. Y es que quien nos gobierna dice que todo está muy bien”.
Olamendi comenta que a Dante Emiliano “lo mataron los aliados de este gobierno. Los estados en donde la presencia del crimen organizado es grande. Los menores de edad y las mujeres se han convertido en botines de guerra. A Dante Emiliano lo mató la indiferencia y los abrazos de los criminales, aliados de este gobierno”.
Presidente de Utopía, organización dedicada a la atención de la infancia y la adolescencia de escasos recursos, Jesús Villalobos dice que se tiene que reforzar la estrategia en cuanto a políticas públicas para la atención de niños y adolescentes, además de una agenda de protección a la niñez y adolescencia del país.
“Esto no está sucediendo en la actualidad y, desafortunadamente, no vemos que vaya a pasar. Esperamos que las candidatas a la Presidencia puedan reflexionar para que esto suceda. Se tiene necesariamente que reforzar el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, no como en esta administración, que lo mandó al DIF como si no tuviera ninguna relevancia. Este sistema se tiene que profesionalizar para establecer líneas estratégicas para que casos como el de Dante Emiliano y muchos otros no ocurran”, expresa.