De los personajes populares de nuestra ciudad, a la que la mayoría de quienes nacimos entre los años cincuenta y sesenta del siglo pasado alcanzamos a recordar, está don Luis Salas Peredo, el eterno encargado de mantener limpio y reluciente el edificio del primer banco regional que existió en el país: El Banco de Zamora.
Don Luis Salas Peredo nació en el año de 1904 en el vecino municipio de Ecuandureo, donde fue bautizado por el ahora candidato a santo, don Leonardo Castellanos. De las familias numerosas de antaño, la suya estaba conformada por 19 hombres y una mujer, lo que daba el total de 20 miembros de su familia.
Nuestro personaje no tuvo la fortuna de asistir a la escuela, por lo que se forjó como autodidacta para aprender a leer y escribir. Pequeño se vino a Zamora, donde radicaba uno de sus hermanos y con él llegó a vivir.
De mediana edad ingresó a trabajar en el antiguo obispado (hoy Palacio Federal) y bajo las órdenes de don José María Cázares y Martínez, siendo el portero oficial del inmueble. En ese puesto de trabajo, don José sufrió la persecución de la tropa comandada por Joaquín Amaro para que les entregara las llaves del Obispado, platicándoles a sus hijos que había llegado a su hogar sin un zapato y agitadísimo por la carrera que terminó en su casa.
A la fundación del Banco de Zamora en 1940, don Luis ingresó a laborar a dicha institución como intendente donde laboró por treinta años; sus hijos recuerdan que en una ocasión que don Luis llegó al Banco a iniciar sus labores, al barrer el exterior de la institución encontró un envoltorio de papel periódico donde estaba una buena cantidad en billetes y algunos cheques a nombre de un próspero comerciante zamorano de aquel tiempo, por lo que lo entregó al gerente del banco y éste a su vez al propietario tanto el efectivo y documentos encontrados. El comerciante llamó a don Luis Salas indicándole que al terminar de laborar lo esperaba en su negocio; al llegar don Luis, el comerciante le entregó una pequeña cajita con algunas sopas, un poco de manteca y algo de azúcar. Esa fue la motivación a la honradez de don Luis Salas.
Don Luis Salas se casó con la señora Ma. Guadalupe Saldaña Rodríguez con quienes procrearon a 9 hijos, aunque doña Guadalupe haya tenido 14 partos.
Antes de que don José Falleciera en 1972, el Banco de Zamora le entregó un reconocimiento por sus años de trabajo en dicha institución.