El famoso actor de “Aladín” en Broadway, Michael Maliakel, habló en un programa especial de navidad de lo mucho que su crianza en la fe católica ha jugado un papel importante en su carrera como actor y cantante en la industria del entretenimiento.
(ZENIT Noticias / Roma).- Muchos conocen la actuación de Will Smith en la película Aladdín. Sin embargo, en Broadway, el musical del mismo nombre se ha presentado durante varios años con un joven actor y cantante como la estrella del espectáculo.
En la pasada Navidad de 2024, uno de los cantantes principales del musical participó en un programa especial del servicio de radiodifusión pública. Durante la transmisión, habló sobre la importancia que tuvo su educación católica en su vida. La producción combinó canciones clásicas navideñas, desde Joy to the World hasta It’s Beginning to Look a Lot Like Christmas, con una historia inspirada en el famoso escritor Víctor Hugo, autor de clásicos como Los Miserables.
¿Quién es Michael Maliakel?
Michael Maliakel es un actor de origen indio. Sus padres emigraron de la India a Estados Unidos a finales del siglo pasado, y tanto él como sus hermanos nacieron en Norteamérica. Aunque creció en una familia con raíces indias, sus padres siempre lo alentaron a participar en actividades que lo ayudaran a integrarse en la cultura estadounidense, como tocar el piano y cantar.
Sus padres provienen de una comunidad cristiana en el sur de la India. Dado que el cristianismo es una minoría en ese país, Michael sintió desde pequeño que formaba parte de una comunidad reducida dentro de otra aún más pequeña: la de los indios cristianos en Estados Unidos. Además, al mudarse a Nueva Jersey por razones de trabajo de su padre, no contaban con familia cercana en la zona, a pesar de pertenecer a una familia extensa.
Como otros chicos de su edad, tuvo que adaptarse a la cultura estadounidense y encontrar su propio camino. Sus padres lo apoyaron en este proceso, incluso al elegir un nombre cristiano, Michael, como reflejo de su fe católica.
A diferencia de otras familias indias, los Maliakel no celebraban las festividades tradicionales de su país de origen, lo que llevó a Michael a sentirse aún más identificado con la cultura estadounidense.
Desde pequeño, su familia fue constante en la asistencia a misa dominical, y fue en el coro de la parroquia donde Michael comenzó a cantar y a descubrir su pasión por la música. También allí tomó clases de piano, lo que se convirtió en un canal para expresar su energía y creatividad.
A partir de entonces, comenzó a involucrarse cada vez más en el mundo del teatro y la música, participando en diferentes coros hasta que finalmente audicionó para obras de teatro. Después de un par de años en la universidad, decidió arriesgarse y perseguir una carrera en el mundo del espectáculo, a pesar de la incertidumbre sobre si lograría hacer realidad su sueño.
Hoy, convertido en una estrella del teatro musical, Michael reflexiona sobre la decisión que tomó: «Creo que le debo mucho a la Iglesia Católica por lo que hago hoy… Crecí cantando en el coro de la iglesia y gracias a eso me enamoré de la música», comentó en el programa. «Cuando tenía ocho años, mi mamá me inscribió en el coro, y desde entonces nunca he mirado atrás… No creo que en ese momento ella imaginara que esa decisión nos llevaría por este camino. Pero, en muchos sentidos, esos momentos fueron fundamentales para que hoy me dedique a esto».
Como mensaje navideño, Michael añadió: «Creo que simplemente debemos tener compasión por aquellos que no se parecen a nosotros, por aquellos que tienen menos, por aquellos que están luchando… Creo que el mensaje de la Navidad, y de este programa en particular, es mostrar compasión hacia esas personas y ser lo más generosos posible, no solo en esta época del año, sino durante todo el año».
