Dolores Hidalgo, Guanajuato
Este Pueblo Mágico es Patrimonio Histórico y cuna de la Independencia; preserva secretos, como la Catedral, testigo silencioso que guarda entre sus muros el sonido de la voz del cura Miguel Hidalgo cuando dio el grito de independencia. Mientras caminas por este encantador e interesante pueblo, de museos y monumentos que narran la historia de México, déjate cautivar por este lugar lleno de tradiciones.
Dolores Hidalgo, oficialmente llamada Dolores Hidalgo Cuna de la Independencia Nacional, es una ciudad mexicana, cabecera del municipio homónimo, ubicada en el estado de Guanajuato, México.
La ciudad es reconocida por decreto, tanto del gobierno local como del federal, como la Cuna de la Independencia Nacional, pues el atrio de su parroquia fue testigo del Grito de Dolores, la convocatoria inicial para tomar las armas en contra del régimen virreinal, proclamada por Don Miguel Hidalgo y Costilla la madrugada del 16 de septiembre de 1810. Tras la consumación de la Independencia, el pueblo de Dolores fue renombrado como Dolores Hidalgo en honor a Miguel Hidalgo y el 15 de diciembre de 1947 el Congreso del Estado decretó que Dolores Hidalgo pasaría a llamarse Dolores Hidalgo, Cuna de la Independencia Nacional.
En la primera mitad del siglo xvi el área que comprende al municipio de Dolores Hidalgo se encontraba dentro de la Confederación guamare, una de las naciones chichimecas, en cuya demarcación existía una aldea de nombre Comacoran (voz chichimeca).
Fue en esta región donde se asentarían los españoles una vez dominado el territorio durante el siglo xvi.
Las tierras fueron dadas como Merced Real de mano del Virrey Marqués de Montes Claros a Pedro Rodríguez Montero, estableciéndose en 1534 la Hacienda de La Erre, parte de la jurisdicción de la Villa de San Miguel el Grande, para la cría de ganado y caballerías, quedando la aldea Comacoran dentro de los límites de la hacienda. Posteriormente Rodríguez Montero vende las propiedades al doctor Hernán Carrillo Altamirano, abogado de la Real Audiencia de México.
A pocos kilómetros al noroeste de la Hacienda de La Erre se construye en 1559 una pequeña capilla dedicada a una figura de Cristo Crucificado denominado Señor San Salvador Consuelo de los Afligidos en un territorio otomí denominado El Llanito, esta capilla aún existe en el poblado de San Antonio del Llanito.
En el año de 1568 el Virrey Martín Enríquez de Almanza erigió la Congregación de Nuestra Señora de los Dolores en el sitio donde estaba asentada la aldea de Comacorán quedando ésta sujeta eclesiástica y civilmente a la Vicaría de Nuestra Señora de la Asunción de la Erre.8
En 1610 la población adquiere el rango de ranchería, adoptando el nombre de San Cristóbal, y queda bajo la territorialidad de la hacienda de La Erre, siendo los dueños de los terrenos Agustín Guerrero de Luna y Doña María Teresa de Villaseca. Posteriormente, durante el año de 1643, se eleva a la categoría de congregación, y en el año de 1790 a la de pueblo, con el nombre de Pueblo Nuevo de los Dolores, nombrándose autoridades políticas del pueblo y desligándose de la dependencia que existía con la villa de San Miguel el Grande.
En el año de 1667 se establece en la región la Hacienda de Trancas, usada al principio como fuerte por el gobierno virreinal, posteriormente se transformó en un centro de importante de producción de hortalizas y otros cultivos.
Hacia 1670 y debido a la inaccesibilidad de los feligreses para llegar a la capilla del Señor San Salvador Consuelo de los Afligidos debido a la crecida de los ríos, se construye una segunda capilla en la ribera norte de El Llanito.
El 20 de septiembre de 1710 se traslada la Vicaría de la Hacienda de La Erre hacia la nueva Congregación de Nuestra Señora de los Dolores en los antiguos terrenos de Comacorán. El Lic. Álvaro de Ocio y Ocampo inicia la construcción de la Parroquia de Nuestra Señora de los Dolores el 2 de febrero de 1712 en terrenos comprados a la Señora María de la O. La construcción siguió ininterrumpidamente hasta finalizar la construcción en 1778, con un costo de 200,000.00$ (pesos oro).
Entre los años 1777 y 1779 se erige el tercer templo o el Santuario del Señor de los Afligidos en la comunidad de El Llanito, siendo el templo que existe en la actualidad, de mayores dimensiones, arquitectura más rica y ornamento más complejo que las dos capillas anteriores. Los portales de su interior tienen en sus bóvedas pinturas al temple con pasajes bíblicos, obras atribuidas al pintor novohispano José Antonio Martínez de Pocasangre.
El 15 de diciembre de 1790, el intendente de Guanajuato, Andrés Amat de Tortosa, ordena elevar la categoría de la Congregación a Pueblo.
El 31 de diciembre de ese año, dejaron de ejercer jurisdicción civil y criminal las autoridades de la Villa de San Miguel el Grande quedando erigido el Pueblo de Dolores y fundando su primer Ayuntamiento cuyos funcionarios designó el Padre José Antonio Gallaga, primo de Miguel Hidalgo.
El 6 de octubre de 1803 Miguel Hidalgo se hace cargo del curato de Dolores proveniente de San Felipe Torres Mochas. En la mañana del 16 de septiembre de 1810 ocurre el Grito de Dolores, llamado hecho por el cura Hidalgo en compañía de Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Abasolo, hace a sus parroquianos a levantarse en contra de la autoridad virreinal de la Nueva España. El llamado se hace al tañer la hoy famosa Campana de Dolores, dando así inicio la guerra de Independencia de México.
El mismo 16 de septiembre el contingente insurgente arribó a la Hacienda de La Erre para descansar y conseguir provisiones. Terminada la comida y después de haber formado el Primer Estado Mayor del Ejército Insurgente, Hidalgo dio la orden de marchar rumbo a Atotonilco. Según la tradición al hacerlo dijo: «¡Adelante señores, vámonos! ¡Ya se le ha puesto el cascabel al gato, falta ver quiénes son los que sobramos».
El 18 de septiembre de 1832, a unos kilómetros al poniente del pueblo de Dolores, se libra la Batalla de El Gallinero entre las fuerzas al mando del Vicepresidente de la República general Don Anastasio Bustamante y las comandadas por el general José Esteban Moctezuma, resultando derrotado este último.
El 6 de junio de 1863, a su paso por Dolores, el presidente Benito Juárez decreta en la casa de Miguel Hidalgo el nombramiento como ciudad de la hasta entonces villa de Dolores, ordenando también la construcción de un monumento a Miguel Hidalgo en el centro de la plaza principal. Un año después, en 1864, Maximiliano de Habsburgo visita el pueblo y celebra el grito de la Independencia en la casa del padre Hidalgo. Cuatro años después, el 3 de junio de 1867, de regreso del norte y a su paso para la capital de la República, el presidente Benito Juárez se hospedó en la ciudad, en la casa que hoy ocupa la Posada Cocomacán.
El 15 de diciembre de 1947, la XL Legislatura del estado, mediante nuevo decreto, establece que la ciudad se denominará Dolores Hidalgo, Cuna de la Independencia Nacional, lo que es confirmado también por decreto del Lic. Miguel Alemán Valdés el día 31 de diciembre de 1948.