Senadores del PRI y el PAN señalan que reporte corrobora las denuncias de 2021 sobre nexos entre la 4T con el narco; Morena dice que es electorero
Senadores del PRI y PAN señalaron que el informe de la DEA sobre la expansión de los cárteles De Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, así como el señalamiento de un involucramiento de militares y políticos con esas organizaciones confirma las denuncias que en 2021 interpuso la oposición sobre una alianza de Morena con el crimen organizado, además de la política de la 4T de no combatirlo.
En entrevista con EL UNIVERSAL refirieron que el informe Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas 2024, publicado por este diario, expone que ambos cárteles pueden operar libremente en algunas partes de México porque cuentan con una red de contactos corruptos entre las fuerzas del orden, el Ejército y la política.
Mario Zamora Gastélum, senador del PRI, dijo que el informe revela lo que es “un secreto a voces” en el país, en el sentido del “enorme involucramiento” del crimen en temas políticos y electorales por la alianza que tienen con Morena y lo cual fue denunciado desde las elecciones intermedias de 2021.
Sin embargo, dijo que el tema del tráfico de droga trasciende a un país, no es tema sólo de México y lo que ocurre también es responsabilidad de Estados Unidos, el principal consumidor de drogas del mundo: “Hay que recordar que la DEA no son precisamente carmelitas descalzas”.
Dijo que es muy peligrosa para el país esta “alianza electoral” del oficialismo con grupos criminales porque además de imponer candidatos descompuso el funcionamiento de un país, donde no hay resultados positivos en materia de seguridad.
Recordó que en las elecciones intermedias de 2021 denunciaron dicha alianza electoral y el informe de la DEA lo confirma, y que ahora no gana las elecciones en muchas regiones del país quien tiene más dinero, más votos, sino quien tiene el apoyo de estas organizaciones. “Nadie puede ganar si tu rival tiene una metralleta colgada al hombro”.
El senador del PAN, Damián Zepeda, dijo que el informe de la agencia estadounidense confirma lo que se ha venido señalando desde hace mucho: “Por un lado la consolidación del poderío de las organizaciones criminales mexicanas que están actuando libres, sin consecuencias, sin que se las combata”.
Agregó que el informe acepta la presencia de los cárteles mexicanos en prácticamente todo Estados Unidos, “pero por otro lado me parece muy grave el señalamiento de que estas organizaciones tienen corrompidos tanto a las policías como al propio Ejército. A mí me parece evidente que existe algún tipo de acuerdo y este informe creo que lo confirma porque es inexplicable el avance y el dominio territorial tan fuerte que tiene el crimen organizado en México y las autoridades voltean para otro lado”, subrayó.
Consideró también que la realidad es que hoy en México no se está combatiendo al crimen organizado, hay casos atípicos o esporádicos, pero no hay una estrategia de combate.
José Narro, senador por Morena, dijo que en caso de que la DEA tenga pruebas de un sistema de corrupción con el presunto involucramiento de militares, policías, políticos y jueces debe presentar pruebas porque de lo contrario queda la sensación de que buscan sólo tener un efecto electoral.
Indicó que la información que tiene la DEA es parcial, ya que la radiografía completa de lo que ocurre en México la tienen el Ejército y los organismos de inteligencia nacional, por lo que hay tomar con reservas lo expuesto por la agencia.
“Además, la DEA en su informe no expone el caso de investigaciones de narcotraficantes, funcionarios o políticos de ese país que estén siendo investigados por estar involucrados con la crisis del tráfico y consumo de fentanilo. La DEA ve sólo la paja en el ojo ajeno”, dijo.
El coordinador del PRD en el Senado, Miguel Ángel Mancera, expuso que desde los informes de 2018, la DEA ha señalado que las “organizaciones criminales mexicanas son las más fuertes en Estados Unidos” y advirtieron del peligro del fentanilo y el papel que juegan los grupos criminales orientales en el lavado de dinero. “Ahora lo grave es que se incluya al Ejército y a la política mexicana”, concluyó.