Este documento busca poner en práctica la erradicación de todo tipo de abuso (de poder, de conciencia, espiritual y sexual) que se genere en ambientes eclesiales por parte de miembros de la Iglesia en el país.
(ZENIT Noticias / Bogotá).- La Conferencia Episcopal Colombiana publicó las líneas guías para una “cultura del cuidado en la Iglesia Católica en Colombia” como un nuevo paso para la protección de menores de edad y adultos vulnerables. Este documento busca poner en práctica la erradicación de todo tipo de abuso (de poder, de conciencia, espiritual y sexual) que se genere en ambientes eclesiales por parte de miembros de la Iglesia en el país, bien sean laicos, religiosos o sacerdotes. Las Líneas Guías entrarán en vigor a partir del 1° de enero de 2023, en la Solemnidad de Santa María Madre de Dios.
Este material hace parte de un camino que los obispos de Colombia iniciaron en el 2013, cuando se adoptaron las “Líneas guía para la redacción de los decretos diocesanos de protección de menores”, aplicadas en su momento en cada jurisdicción eclesiástica. Ahora, fruto de la evaluación de este documento que se dio gracias al apoyo del Consejo Nacional para la Cultura del Cuidado y basados en los recientes documentos del magisterio pontificio y la normativa canónica y estatal vigente, la Iglesia desea ofrecer este insumo como expresión de unidad, búsqueda de caminos que lleven a la verdad y la justicia, aceptación de errores y negligencias, asumiendo la petición del perdón y la reconciliación.
Según se lee en la presentación de este documento, se trata de unas orientaciones generales para que en las distintas jurisdicciones eclesiásticas del país se implementen políticas, protocolos, procedimientos, acciones y estrategias en el marco de un Sistema para la Cultura del Cuidado. Además, con este material «Buscan prevenir y atender la violación de los derechos fundamentales de las personas y los abusos de cualquier tipo cometidos por ministros ordenados, personas consagradas y laicos que prestan algún ministerio o servicio en nuestra Iglesia».
Ahora el compromiso de la Iglesia Católica es adoptar estas normas al interior de cada circunscripción eclesiástica, y permitir que todos los creyentes y la sociedad en general las conozcan, con el fin de promover una «mayor conciencia respecto del cuidado amoroso que requieren también los pastores y los ambientes eclesiales de pastoral, siempre que trabajen, se encuentren y convivan con niños, niñas, adolescentes, jóvenes, adultos y personas vulnerables».